¿Nueva era? Ya sabes como va esto, lo utilizarán como reproche, como hicieron con lo del “experimento sociológico”.
Los reproches no funcionan, ya lo dice la canción. Aquel “experimento sociológico” fue premonitorio y los años no han hecho más que demostrar que en eso se ha convertido GH. ¡Ojalá la ‘nueva era’ traiga las mismas buenas noticias!
¿No te parece increíble -se me vislumbra que sí- seguir con el mismo equipo que hace casi diez años y ya once ediciones? Sois bastantes los que lleváis desde el primer día, ¿no?
Ese es uno de los grandes regalos que me ha dado este programa. Mis compañeros se rien de mi cuando digo que entre los que trabajamos en Zeppelin y los que lo hacen en Telecinco, somos casi 500 personas las que estamos implicadas en el programa. Cuando miro y veo que muchos de ellos están desde el origen, que seguimos trabajando a gusto, que seguimos queriendo al programa como el primer día, me emociono. Algun@s se fueron y han vuelto, incluso. Eso, un equipo sólido y entregado es el secreto de Gran Hermano.
Aparte de buenos datos de audiencia y suerte para este GH XI, ¿qué le pides a esta edición? (no vale decir: “lo mismo que a todas”)
Nunca te diría eso, Gato… o ¿tu responderías eso si yo te lo preguntara? Le pido potencia, le pido historias que nos atrapen, le pido concursantes entregados a vivir una aventura que no olvidarán jamás. En estos momentos previos al comienzo en los que soy virgen del todo porque, aunque nadie me crea, desconozco lo que voy a presentar, sueño con un Gran Hermano innovador, audaz, austero y lleno de risas y emociones. ¿Que es lo mismo de siempre? pues quizá sí pero… ¿qué es la vida al final, sino?
Le dijiste a una periodista de El País que la televisión es el mejor invento del siglo XX, ¿por qué?
Ya sabes que soy exagerada por naturaleza y que mis palabras son casi siempre excesivas. Es cierto que considero la televisión un grandísimo invento. A través de ella nos llega el mundo y eso significa que nos llega lo bueno y lo malo. Ella nos informa, nos acerca a otros, nos enseña muchas veces sin intermediarios lo que habríamos visto si ‘hubiésemos estado allí’. La televisión hace la vida en soledad más llevadera, acompaña, entretiene a mayores y niños y, también como la vida, puede dañar. Es un gran invento.
¿Te gusta que te digan “show-woman”?
Estoy acostumbrada a que digan lo que les salga del bolo.
Decías un día la temporada pasada que eras simplemente una “morcillera”, quitándote importancia. Pero leer el ‘cue’ bien no es algo que haga mucha gente, y mucho menos improvisar y terminar haciendo lo que te da la gana. Es importante la improvisación, ¿verdad?
Lo importante es atrapar la atención de los que te están viendo. Lo importante es justificar tu sueldo con un férreo control del plató. Lo importante es improvisar en medio de la máquina mejor engrasada y del guión más perfecto. También en eso el oficio te salva la vida. Solo improvisas si conoces a fondo y por eso me ha parecido siempre imprescindible dejarme la vista en la pantalla viendo las 24 horas de la casa en directo, leyendo a “mi Gato”, otras webs que siguen el programa y los máximos comentarios de los seguidores posibles.
Lo mejor es que una vaya bien preparada al examen cada semana…
¿Qué se hace para tener las cámaras “de tu parte”?
Quererlas. No olvides que las cámaras son la gente.
Para hacer una buena entrevista a un expulsado de Gran Hermano, ¿cuáles son tus armas?
Cuando salen de la casa están en carne viva. Llegan descolocados, desorientados y hay que darles sitio, dejarles situarse y respirar. Tus ojos son su sujeción y tienen que sentir que les miras con cariño y atención. Una vez que se centran puedes hacer las preguntas que debes hacer y que ellos saben que no serán fáciles. Nadie mejor que ellos lo saben.
Un día te escuché decir a una concursante que si fueras realmente dura con ella se iba a enterar, respondiendo a sus quejas sobre tu supuesta dureza. A veces les favorece mucho que seas dura, ¿no?
Así lo creo. Las personas que responden a la dureza, suelen ganarse al público. De la dureza suele salir lo mejor de un concursante porque no olvidemos que son personas preparadas para aguantar mucho. Los castings no se hacen en vano. Los castings, que son la base del éxito de cada edición, dan la oportunidad de escoger a las personas mejor preparadas para aguantar esta experiencia que consiste en convivir en la casa de Guadalix pero también en dar explicaciones de ese comportamiento cuando son expulsados de la casa. Tod@s ell@s saben lo que significa Gran Hermano.
¿Por qué fracasó ‘La tribu’?
Porque nos equivocamos.
¿Cuál ha sido tu mayor fracaso?
La Tribu fue un fracaso y duele decirlo porque la ilusión era inmensa. Tampoco funcionó Más que palabras, el último programa que hice para Antena 3 cuando todavía trabajaba con José Sámano. Ese titulo fue premonitorio porque tras el llegó el final de nuestra historia como pareja, es curioso.
¿Y tu mayor éxito?
El mayor éxito es seguir trabajando con fuerza e ilusión y seguir teniendo la confianza de tu empresa para hacer dos programas tan buenos como Diario de… y Gran Hermano. El gran éxito es abrir los ojos cada mañana y poder sonreír.
Nos vemos el domingo. Lo pasaremos bien, ¿no?
¿Tú que crees minino??????
Pues que sí. Y que Internet será el mayor de los inventos en este siglo XXI. Besos Miles.
Y miles.
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